Prevención durante la época de los temporales

Uno de los casos más repetidos es el de el destrozo de los muros de primera línea que protegen terrazas y paseos marítimos

En lo que llevamos de año han sido múltiples los temporales que han afectado a todo el país, siendo especialmente importantes en el litoral. Ante este tipo de sucesos es difícil actuar ya que son imprevisibles y con una fuerza muchas veces superior a lo que estamos preparados, aunque esto no es excusa para llevar a cabo un plan de prevención adecuado.

Los costes de reparación de estos desperfectos se cuenta ya por millones: el litoral valenciano, la costa malagueña, A Lanzada, O Morrazo… Todos han sido duramente golpeados por el viento y las olas dejando en ruinas casas, paseos y barcos.

Uno de los casos más repetidos es el de el destrozo de los muros de primera línea que protegen terrazas y paseos marítimos. Las imágenes de las terrazas de Denia totalmente devastadas o el paseo de madera de A Lanzada cubriendo la carretera, hace que nos planteemos seriamente si estamos teniendo todo el cuidado que deberíamos a la hora de construir en este tipo de zonas.

Las causas son complejas ya que las zonas costeras son el blanco preferido para especuladores y empresarios sin ninguna preocupación más allá que su bolsillo. Las construcciones masivas y al límite de la legalidad son muy habituales sobretodo en la Costa Blanca y Andalucía.

La solución, en cambio, pasa casi por completo por las autoridades públicas tanto locales, como autonómicas y nacionales. Medidas como la prohibición de construir en zonas cercanas a la costa, que son especialmente vulnerables a los temporales, o la construcción de muros de contención en paseos marítimos, a pesar de ser menos estéticos, son imprescindibles.

Sabemos cuánto nos costará la reparación de estos desperfectos y sabemos quién lo pagará. En las manos de las instituciones está evitar este tipo de situaciones en el futuro, falta saber si se atreverán a plantar cara a ciertos sectores

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