El café se encarece un 57% en el supermercado en menos de tres años, ¿por qué?

Granos de café. PIXABAY
La merma de las cosechas por efecto del cambio climático o el mayor coste de transportar el grano por los ataques en el mar Rojo empujan al alza el precio de esta bebida tan consumida
 

El café es para muchos la gasolina necesaria para afrontar el día y una adicción confesable, aunque más cara de un tiempo a esta parte. En menos de tres años, este producto presente en prácticamente todos los hogares se ha encarecido en torno a un 57% en los lineales de los supermercados.

En un escenario en el que todo en la cesta de la compra ha subido, puede que para algunos haya pasado más desapercibida esa escalada en el precio del café, pero quizás los más cafeteros la hayan notado especialmente en su bolsillo y se pregunten por qué. 

La cotización de la materia prima, los granos sin tostar, ha alcanzado en los últimos tiempos niveles históricamente altos en los mercados globales. Para analizar el ritmo al que se mueve hay que poner el foco en varios factores: la producción, el consumo, los costes que afronta la industria cafetera y la especulación de los fondos de inversión.

Parámetros condicionados por la tormenta perfecta que supuso encadenar una pandemia, sequías o heladas cada vez más intensas en los campos de cultivo, conflictos bélicos que han desencadenado una inflación generalizada y encarecido el transporte marítimo o la energía y el consecuente enfriamiento económico.

Merma en las cosechas

En lo que toca a la producción, las grandes potencias mundiales son Brasil, Vietnam, Colombia, Indonesia y Etiopía. El cultivo en estas latitudes esta muy condicionado por la meteorología y el cambio climático juega en contra. Los episodios de tiempo muy seco o de temperaturas excesivamente bajas propiciados por los fenómenos de El Niño y la Niña lastran las cosechas y reducen la oferta, lo que contribuye a empujar al alza los precios.

Y eso que la demanda en territorios que son grandes importadores como la Unión Europea o Estados Unidos refleja un descenso en los últimos tiempos.

Transportar el grano, más caro

Hay otro factor que ha calentado el precio del café y son los ataques a embarcaciones en el mar Rojo en el marco de la guerra entre Israel y Hamás. Ese conflicto en una de las principales vías de transporte de grano genera demoras, pues alterna las rutas regulares de envío, y eleva los costes. La consecuencia es que proveerse sale más caro y los tostadores elevan precios. 

Con este telón de fondo, es imposible predecir con certeza cómo se comportará el precio del café en el corto y medio plazo, pero las perspectivas no son halagüeñas para los consumidores. El presidente del gigante italiano del café Lavazza, Guiseppe Lavazza, advirtió recientemente que seguirá subiendo en el supermercado. 

Reglamento contra la deforestación

A las causas de la subida se sumará el año que viene otra: un nuevo reglamento de la Unión Europea que entrará en vigor en enero de 2025 y que prohibirá la venta en el bloque comunitario de café –y otros productos como el aceite de palma, el cacao, la soja o la carne de vacuno– procedente de terrenos deforestados.

Los tostadores deberán demostrar que no se talan ni dañan árboles para cultivar el grano que compran. Esta exigencia obligará prescindir de parte de las exportaciones actuales. 

Habrá que ver si la bebida se convierte en un lujo y pedimos, como Juan Luis Guerra, que llueva café.