Comprar un coche de segunda mano cuesta hoy unos 3.500 euros más que hace tres años. Es la constatación en cifras del fuerte encarecimiento que se han anotado los usados, y en el que siguen inmersos. En mayo, el precio medio de estos turismos se situó en 20.337 euros en España, lo que supone un 6,4% más que un año antes.
Aunque está algo por debajo del récord absoluto registrado en septiembre de 2023 con 20.337 euros, prácticamente duplica el mínimo marcado en primavera de 2013, de apenas 11.000 euros.
Es una tendencia que se observa en todas las comunidades, con Galicia como la décima con los vehículos de ocasión más caros: 20.034 euros en mayo, un 6,2% más que en el mismo mes de 2023, según los datos del último barómetro de Coches.net.
Oferta y demanda
El precio de estos vehículos ha pisado el acelerador fundamentalmente por una razón: los turismos que están haciendo crecer la oferta en el mercado de segunda mano son los más caros, aquellos más jóvenes —los que buscan nuevo dueño se duplicaron en el último año— y los híbridos y eléctricos, que con un crecimiento similar ya representan el 14% de las unidades ofertadas.
Con todo, los coches usados con más salida siguen siendo los diésel, que copan el 53% de las transacciones. En cuanto a la antigüedad, la demanda se concentra en los turismos de más de diez años —58% de las ventas—.
Distancia con los nuevos
El fuerte encarecimiento de los vehículos de ocasión ha acortado distancias con el precio de los nuevos, que también ha subido con fuerza. Para hacerse una idea, comprar y matricular un coche salía por 23.666 euros de media en 2023, según datos de la Agencia Tributaria.
Uno de los factores que influye es que los fabricantes deben incorporar cada vez más sistemas para reducir emisiones y de ayuda a la conducción, lo que se traslada al precio final.
